sábado, 27 de febrero de 2010

Sine Die

La rosa roja nace de tiempo
en tiempo, para que la corten
y la admiren y muera.

La rosa naranja teme a la muerte.
No nace, no nace aún, hasta que el ansia
le ahoga. Le ansían, la cortan, y muere.

La rosa blanca es tan pequeña,
demasiado blanca. Siempre fue
según el grillo vianda del suelo.

Rosa roja. Otoño, verano, invierno y Primavera.

Rosa naranja. Nunca nace, revienta.

La rosa blanca es tan sosa
-¡El jardín siempre blanco!-
que no nace, rebosa.

Invertidos triángulos

Invertidos triángulos de sombra amores que imantan iguales cobijan. Saqueadores a instantes por las pantallas de los móviles agujerean ...